¡Al fin!
¡Al fin hemos podido
volver a llenar la Capilla de Mater
con motivo de una celebración!
El acontecimiento, además,
se ha retransmitido por videoconferencia
para todas aquellas personas
que no cabían dentro de la Capilla
o que están afuera de Centro Mater.
La celebración ha empezado
con el coro,
más numeroso que nunca,
y con Griselda Subirà,
adjunta a la coordinación del Ocupacional,
como maestra de ceremonias,
que ha dado la voz a
sor Margalida Mateu.
Mateu ha hecho el pregón de la fiesta
rememorando a San Francisco de Asís
y explicando a las personas asistentes
los rasgos más destacados
de su humilde vida.
Después ha sido David Prats,
de Contabilidad,
en representación de los Servicios Generales,
quien ha leído unas palabras
de agradecimiento.
El evento ha continuado con las ofrendas:
un/a representante de cada servicio
o grupo de personas
ha dejado sobre el corazón de elementos naturales
una maceta -fabricada con productos reutilizados-
con tierra y una semilla o planta.
Poco a poco, el corazón se ha ido llenando
de color y vida
con las diferentes plantas
que han ido posando.
También ha participado Marian,
en representación de Centro de Día,
leyendo las plegarias;
Empe, del Ocupacional,
con el Cántico de las Criaturas;
y Maite Sánchez,
trabajadora social de Atención Temprana,
con un sencillo y bonito cuentacuentos
para acercar la vida y obra
de Sant Francesc
a los y las más pequeños/as
de la gran familia Mater.
Alicia Garcia, Superiora General
de la congregación de Hermanas Franciscanas
Hijas de la Misericordia,
no se ha querido perder la celebración,
y ha aprovechado la ocasión
para dedicar unas palabras:
«Gracias por lo que sois,
gracias por lo que hacéis»,
ha dicho, dirigiéndose
a todos los asistentes allí presentes.
Del cierre del acto se ha encargado
Bàrbara Mestre, directora general de Mater,
quién ha hecho una analogía
con el corazón y todas las plantas
que lucían adentro:
«Este corazón tan grande
es el corazón de Mater,
un coro enorme (…)
y estas plantas somos todos nosotros,
entre todos hacemos un gran jardín».
El punto final lo ha puesto el coro
con la canción Madre Tierra,
que ha levantado de los bancos
a la gente, que se ha animado a bailar
y así ha sido como ha abandonado la Capilla:
al ritmo de la famosa canción de Chayanne.
Dame la mano, Color Esperanza y Conéctate y confía
son otras de las canciones
que ha interpretado el coro de Mater,
llenando de música y ritmo la Capilla
entre las diferentes lecturas.
Después de la celebración
todo el mundo ha podido merendar
coca de albaricoques y helado
que han preparado
desde la Cocina de Mater.
¡Gracias a todas las personas
que habéis hecho posible que hoy
volvamos a celebrar Sant Francesc!